Perros de pre(N)sa

Vengo siguiendo con mas simpatía que atención la guerra barriobajera que se está produciendo entre los distintos grupos de prensa. En realidad, no es nada nuevo. Pero han cambiado, en cierto sentido, los contendientes. Desde siempre el grupusculo de mafiosetes que se organiza en torno al diario el Mundo y la Cadena Cope han centrado sus iras en la izquierda divina y burguesia deja vu que vive de los beneficios del grupo Prisa (El Pais, Cadena Ser, Canal + .... Cuatro y sus editoriales).

Pero ahora, sin olvidar a sus eternos enemigos, este sector de defensores a ultranza de la libertad de prensa organizados en torno a sus caudillos (Pedro J y Federico) han decidio apostar fuerte y pretenden hacerse con el control absoluto de la prensa conservadora. Saben que es la única forma de aumentar su público y de controlar de paso el PP (poco les falta para lograrlo).

En medio se han quedado y casi anonadados la derecha clásica y educada de ABC y sus medios paralelos (Vocento). Ahi está por ejemplo Luis del Olmo (Punto Radio) perdiendo la compostura y dejando que se le caliente la boca para decir que el mismo le pondría una bomba a Federico. Y es queen ABC nunca nadie pensó que les iban a llover ostias desde la derecha y por si fuera poco de mano de la Santa Madre Iglesia.

Estos liberales de opereta (Pedro J., Abadillo, Losantos, Vidal, Alvarez de Toledo, Sinova, Moa, etc..) que se pasan el día hablando de conspiración y ponen en cuestión cualquier institución estatal que se les ponga por delante (Justicia, Policía, Legislativo, Ejecutivo, etc) serían hasta simpáticos si creyeran al menos un 5% de lo que predican. Pero resulta que todo ese cuento de la libertad de expresión, de la busqueda de la verdad, (como si no supieramos todos lo que realmente paso), la defensa de las víctimas, les importa un bledo. Lo que de verdad les calienta la pluma y los microfonos es la pasta y el poder que huelen. La que ya vieron y olisquearon cuando gobernaba el PP y había concesiones para el Mundo Tv y Libertad digital.

Yo, sigo riendome.