martes, septiembre 29, 2015

Intemperie, literatura cruda

A quien pueda seguir esporádicamente este blog no debiera de extrañarle que se reseñen libros, o cualquier otro hecho cultural, con cierto, por no decir habitual, retraso. Así que nadie se sorprenderá si a estas alturas del calendario dedico unas líneas a esta Intemperie de Jesús Carrasco, que ya hace unos añitos que saltó a la fama.

Y desde luego que el prestigio que alcanzó en el momento de su publicación merecido lo tenía y creo que continúa mereciéndolo. Tuvo hace unos meses, por motivos que no vienen al caso, la oportunidad de acudir a una conferencia del autor y ya entonces, sin haber leído el libro, pero si consciente de su fama, me pareció una exposición interesante en la forma y en el fondo. Interesante la persona y lo que expresaba. Fue entonces cuando decidí que Intemperie debía de ser uno de los libros que introducir en la lista de lecturas futuras y ahora le ha llegado su momento.

Una vez acabada la lectura de esta breve novela no puedo más que recomendarla vivamente. Por supuesto, que en Intemperie hay reflejos de autores anteriores; personalmente me atrevería a decir que del mejor Cela y quizás también del mejor Delibes. Pero también hay una historia pequeña, no en la tragedia que narra, si no en la simplicidad de su génesis que tiene la virtud de narrar muchas de las grandes batallas de los inocentes contra los culpables, de los pobres contra los poderosos, de los oprimidos contra los opresores, de la voluntad contra el destino.

Y todo ello ubicado en un espacio opresivo, una naturaleza enfrentada al individuo con toda la crudeza y perseverancia que sólo la naturaleza puede concederse. Con la virtud de situar la trama en un lugar ignoto y una época no especificada, pero que cualquier lector podrá ubicar tanto lo uno como lo otro.

Si a todo esto le sumamos un lenguaje rico, un vendaval de estilo desatado, inteligencia en las expresiones y la certeza para describir situaciones y sensaciones, Intemperie es una novela de las de verdad, de las que tienen la virtud de sintetizar en pocas páginas un torbellino de emociones. Una novela elegante y cruda en su estilo y sobre todo en la historía que desarrolla.

Una historia simple que podría narrar otra multitud de dramas. Verdaderamente recomendable.

No hay comentarios: